Entre megáfonos, sirenas, pancartas y una abierta confrontación entre el PRI y Morena, arrancaron los trabajos del segundo año de la actual Legislatura.
La entrega del Primer Informe de Gobierno por parte de la SecretarÌa de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, había transcurrido en calma, luego de que ayer, Morena y el PAN acordaron extender la gestión del morenista Sergio Gutiérrez Luna hasta el próximo 5 de septiembre.
TE PUEDE INTERESAR: ¡Leche que no es leche!… Profeco lanza advertencia sobre producto que podría ser una imitación
La tranquilidad subsistió incluso al primer posicionamiento de la senadora Alejandra Barrales, quien resumió que el último año Morena representó la impunidad para agresores sexuales, como Cuauhtémoc Blanco; la corrupción, como la de Cuitláhuac García; la violencia imparable como la que vivió Sinaloa; y el contubernio con La Barredora.
El acuerdo de civilidad se rompió cuando el senador y dirigente del tricolor, Alejandro “Alito” Moreno, subió a tribuna.
Apenas pisó el estrado, desde las curules de Morena comenzaron a escucharse gritos aislados, que poco a poco fueron escalando.
Alito comenzó su intervención saludando a organismos internacionales, a los parlamentos del mundo y a su familia, e incluso acusando una política de persecución, pero lo que encendió los ánimos fue la acusación de un “narcogobierno” de Morena.
”Ustedes son un cártel que pactó con los criminales”, lanzó. En medio de los inútiles llamados al orden de Gutiérrez Luna, la respuesta de la bancada mayoritaria fue la amenaza del desafuero.
Ante la bancada del PAN que se mantuvo al margen de los enfrentamientos para no romper el acuerdo en torno a la renovación de la Mesa Directiva que se vota mañana, el senador acusó al ex Presidente Andrés Manuel López Obrador de haber levantado el segundo piso, pero de las narcodictaduras, porque el primero lo alzaron el ex Mandatario de Venezuela, Hugo Chávez y su sucesor, Nicolás Maduro.
De nuevo, el priista fue interrumpido, esta vez con el grito de “Es un honor estar con Obrador”.
Entre aplausos y críticas, Moreno continuó provocando: responsabilizó a Morena del peor crecimiento económico, la menor producción petrolera, de despedazar al Poder Judicial, de provocar m·s muertes que AlQaeda.
”No les tengo miedo, aquí los voy a enfrentar”, soltó al grito de “presidente” de sus correligionarios. A Alito le siguió la intervención de la petista Geovanna Bañuelos, pero la bancada tricolor abandonó el pleno en medio de gritos de “Quieren llorar” para luego regresar con megáfonos.
La intervención de Bañuelos fue interrumpida por cerca de 20 minutos hasta que el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, entró al Pleno y acercó a dialogar con Alito y con Rubén Moreira.
”No vale la pena que nos confrontemos, que hagamos de esta Cámara un escenario de violencia. Hagamos un esfuerzo, de cordura, de respeto”, convocó Monreal desde su curul.
Moreira aceptó, pero le echó en cara que su partido cumplió con el acuerdo que sostuvieron para que transitara con tranquilidad la entrega del Informe de Gobierno.
Tras avivar nuevamente los ánimos, Alito reconoció el llamado, pero remató: “No podemos permitir que una bola de salvajes quieren reventar el País”.
Con la crisis desactivada, el debate continuó. El PAN se mantuvo de bajo perfil, y lanzó críticas, pero sin hacer escándalo.
Se espera que este martes, la tensión en la Cámara de Diputados continúe, ahora por la presidencia de la Mesa Directiva.
