La familia de Jaime Rivera, quien denunció públicamente irregularidades en un caso de custodia, detenido el jueves en la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (Pronnif), expresó sus dudas sobre la imparcialidad con la que las autoridades están llevando el proceso de custodia de su hija menor.
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La familia actualizó que, durante las últimas diligencias realizadas sobre el caso, han observado que la madre de la niña ha recibido acompañamiento directo de personal de la institución.
Señalaron que, incluso, el día de ayer, previo al citatorio, observaron a las autoridades caminando con funcionarias en oficinas externas a la Pronnif, lo que califican como un trato y acompañamiento diferenciado.
El arresto de Rivera ocurrió después de que, durante un citatorio en la dependencia, su hija corriera hacia él y lo abrazara. El Ministerio Público consideró que este hecho rompía la orden de restricción vigente, que le impedía tener contacto con la menor durante dos meses.
“La niña aventó la mochila y se fue a los brazos de su padre, y ese fue el motivo para que el MP lo mandara a arrestar de forma arbitraria, sin una prueba de que él haya sido quien la buscó”, expusieron sus abogados.
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El citatorio había sido derivado de una denuncia interpuesta por Rivera contra la madre de la menor por presunta violencia familiar y en contra del abuelo por presuntos abusos.
La hermana del detenido, Karla Rivera, reiteró que la familia teme que la exposición pública del caso haya influido en las decisiones de la autoridad, y ahora suman la preocupación de que no se esté garantizando neutralidad en el proceso.
Actualmente, Jaime Rivera permanece detenido, mientras su equipo legal prepara los recursos para su liberación.
